Todos hemos escuchado alguna vez la popular canción que dice que Tabasco es un edén, y prueba de ello son sus paisajes naturales entre ríos, sierra, lagunas, cascadas y caminos que cuentan sus historias ancestrales. La belleza natural y cultural del municipio de Tenosique lo han convertido en uno de los tesoros más apreciados del estado de Tabasco y cada vez un número mayor de visitantes llegan a su cabecera municipal, Tenosique de Pino Suárez, para explorar los muchos atractivos que te ofrece. La palabra Tenosique proviene del vocablo maya ta-na-tsiic, que se traduce como casa del hilandero.
Los ríos Usumacinta y San Pedro Mártir, que recorren este lugar, tienen un papel protagónico tanto entre los atractivos naturales de la zona como en la vida cotidiana de sus habitantes, tanto en la actualidad como desde tiempos remotos..
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La reserva ecológica Cañón del Usumacinta es uno de los encantos mejor preservados de Tenosique y un lugar para disfrutar al aire libre, estar en contacto con la naturaleza, y practicar deportes de aventura. Aquí te dejamos algunas recomendaciones para que no pierdas detalle de este increíble lugar:
-Tenosique de Pino Suárez
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La cabecera del municipio de Tenosique se levanta a orillas del río Usumacinta y obtuvo la categoría de ciudad en 1915, para disfrutar del contacto de Tenosique con el río Usumacinta, hay que dar un paseo por su malecón, pero si o que prefieres es aprender sobre el devenir de la ciudad, lo ideal es visitar el Museo de Historia de Tenosique, que conserva piezas arqueológicas de las culturas maya y olmeca, artesanías y objetos relacionados con las danzas tradicionales de la región, aunque la mayoría de los visitantes llegan a Tenosique de Pino Suárez para disfrutar de su famoso Carnaval, para visitar los vestigios arqueológicos que se levantan en sus alrededores o para practicar el ecoturismo y los deportes de aventura en los bellos paisajes que rodean la ciudad.
-Río Usumacinta
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Este río es fuente de vida y esparcimiento, además de vía de comunicación para los tenosiquenses y sus visitantes, cerca de la cabecera municipal se encuentra Boca del Cerro, donde hay un balneario y centro turístico, además de un puente que atraviesa el río y se utiliza para practicar el puenting, una actividad que consiste en saltar al vacío desde una altura de 35 metros con unas cuerdas y arneses amarrados a la cintura.
En Boca del Cerro encontrarás un restaurante, un mirador y embarcaciones que ofrecen recorridos por el río, durante la temporada seca, en las márgenes del río se forman playones donde se reúnen las familias para disfrutar del agua.
El río Usumacinta será tu favorito si quieres practicar el rafting ya que cuenta con los rápidos de San José y Desempeño, que le agregan mucha emoción a la aventura, y durante el mes de mayo se celebra el Maratón Náutico del Río Usumacinta.
La reserva ecológica Cañón del Usumacinta fue designada Área de Protección de Flora y Fauna desde 2008 y comprende una superficie de más de 46 mil hectáreas, que incluye los rápidos del río, los cenotes Yaax Ha y Aktun Ha, además de varios sitios arqueológicos.
-Zonas Arqueológicas
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La zona arqueológica de Pomoná es una de las más importantes del estado de Tabasco, está conformada por seis conjuntos arquitectónicos, de los cuales solo uno está explorado y consolidado. Su nombre moderno se obtuvo de un glifo, aunque investigaciones más recientes consideran que probablemente el lugar se llamó Pakbul, que se traduce como dios de la pipa.
Su estilo arquitectónico guarda similitudes con Palenque, los investigadores señalan que el sitio fue construido como punto estratégico de control ubicado en el límite entre la zona serrana del alto río Usumacinta y las llanuras costeras, también encontrarás un interesante museo.
La zona arqueológica de San Claudio empezó a ser estudiada en 1997 y actualmente se puede visitar, los arqueólogos encontraron allí 35 entierros humanos, más de 90 construcciones y consideran que el lugar se dedicaba a la explotación y comercialización de la obsidiana.