Estamos en un 2019 en el que no podemos silenciar más temas sobre el cuidado del medio ambiente, y ahora se trata del turismo que más lo contamina: los cruceros.
Una vuelta por alguna isla de Italia, la Riviera Maya, con fiesta, platillos y más, no suena nada mal, pero la naturaleza agoniza cada vez que uno de estas embarcaciones navega por sus mares, y es que un crucero produce 3.5 kilogramos de basura al día, que en un mes, se convierten en 105 kg. Ahora, si en promedio viajan 6 mil personas, esto generaría 630 toneladas de residuos.
Además de la basura, no olvidemos los líquidos tóxicos que las embarcaciones derraman en el mar, los cuales son una combinación de aceites, trozos de metal, gasolina, grasa, residuos en descomposición, pintura y más.
Está comprobado que los cruceros contaminan más que todos los autos de Europa reunidos, esto es porque siempre están andando, jamás se detienen. Y no sólo contaminan con dióxido de carbono (CO2), también producen gases que contribuyen al cambio climático.