En el Caribe mexicano, una región conocida por su clima cálido y tropical, un viñedo ha logrado llevar el turismo enológico a una zona inusual para este tipo de atractivos.
José Viveros Tadeo y su esposa Janey Aguilar Reyes, que solían dedicarse a la actividad maderera en la comunidad de Noh-Bec, en Felipe Carrillo Puerto, tuvieron un cambio en sus vidas cuando adquirieron una pequeña planta de uva hace seis años.
La planta llegó por casualidad cuando Janey buscaba una enredadera para dar sombra a sus orquídeas. Sin embargo, la planta de uva dio fruto y su esposo tuvo la «loca idea» de hacer vino en una comunidad rural de la zona maya en Quintana Roo, donde nunca antes se había cosechado uva.
La iniciativa de crear un viñedo en una región no tradicional para la viticultura fue reconocida con el segundo lugar en el premio de «Innovación Turística» del Gobierno estatal. Esto les brindó capacitación y apoyo para desarrollar un proyecto ecoturístico.
El proyecto familiar ha atraído la atención de agrónomos de la Universidad de Chapingo y enólogos que se han ofrecido a colaborar en la creación del primer vino de la zona maya.
A pesar de las dudas iniciales y las opiniones de que no sería posible cultivar uva en esa región, el proyecto tuvo éxito. La familia Viveros cosechó uvas de variedades como merlot, cabernet sauvignon y moscato, además de otras frutas no comunes en la zona, como fresas, duraznos y zarzamoras.
El viñedo, conocido como ‘Viñedo Viveros’, ha comenzado a recibir turistas interesados en conocer el proceso de producción de vino en este entorno poco convencional. A medida que el proyecto se ha expandido, se ha convertido en un destino ecoturístico y rural.
Además del recorrido por el viñedo, los visitantes pueden disfrutar de comidas en el restaurante del lugar. La familia Viveros planea seguir expandiendo su proyecto, construyendo cabañas para hospedaje y ofreciendo actividades como recorridos en bicicleta, avistamiento de aves y exploración de la laguna cercana.
A través de su innovador enfoque en la viticultura y el turismo, el viñedo «Viñedo Viveros» ha logrado transformar una comunidad rural en un destino turístico único en el Caribe mexicano.