Enclavado en la región del Totonacapan, al norte del estado de Veracruz, se encuentra Zozocolco de Hidalgo, un destino que cautiva con su encanto colonial, sus pintorescas calles empedradas y su entorno de exuberantes lomeríos. Este pueblo mágico, atravesado por las aguas del río Tehuantepec y arroyos del río Tecolutla, invita a los visitantes a sumergirse en una experiencia única que combina historia, cultura y naturaleza.
Las calles zigzagueantes de Zozocolco, vestidas con la piedra de laja característica de la zona, conducen a los viajeros a través de un paisaje pintoresco, donde las casas coloniales se mezclan armoniosamente con árboles frutales y una variedad de plantas medicinales y aromáticas.
Una parada obligada es la majestuosa Iglesia de San Miguel Arcángel, un monumento que data del siglo XVII y que exhibe una arquitectura franciscana única, junto con su curato y su distintivo reloj inglés. Esta iglesia, dedicada al patrono del pueblo, San Miguel Arcángel, es el epicentro de la festividad más importante de Zozocolco, que tiene lugar a finales de septiembre y celebra la rica herencia cultural de la región a través de danzas, música y procesiones tradicionales.
Otro evento destacado en Zozocolco es el Festival de Globos de Papel de China, que se lleva a cabo en noviembre y transforma los cielos del pueblo con coloridos diseños artesanales. Durante este festival, los visitantes pueden participar en talleres y aprender la técnica para elaborar globos tradicionales, que luego se lanzan al aire, creando un espectáculo impresionante.
Además de su patrimonio cultural, Zozocolco ofrece una riqueza natural que invita a la aventura y la exploración. Sus alrededores están salpicados de caídas de agua y pozas cristalinas, como La Junta, El Callejón, El Tecajete, Poza Verde y La Poza del Diablo. Entre estos paisajes naturales, destaca El Caliche, un lugar mágico con paredes rocosas que forman pasadizos caprichosos y una poza de agua cristalina habitada por acamayas y tortugas.
La experiencia en Zozocolco de Hidalgo no estaría completa sin probar su deliciosa gastronomía, que fusiona tradiciones ancestrales con sabores auténticos. Los visitantes pueden disfrutar de platillos como el mole regional, el chilpozonte de pollo de rancho, la barbacoa y una variedad de guisos elaborados con plantas silvestres locales.
Zozocolco de Hidalgo, con su combinación única de historia, cultura y naturaleza, promete una experiencia inolvidable para aquellos que buscan descubrir los tesoros ocultos del norte de Veracruz.