La Ciudad de México suma un nuevo atractivo cultural: este sábado abre oficialmente el Museo Casa Kahlo, el antiguo hogar de los padres de la artista en la colonia Coyoacán. El espacio, reconvertido en museo por iniciativa de su familia, invita a conocer de cerca las raíces, la infancia y los primeros pasos creativos de una de las pintoras más influyentes del mundo.
“Era donde se refugiaba cada vez que se enojaba. Es todo lo que realmente ella era, aparte de ser la artista”, explicó Mara Romeo Kahlo, sobrina nieta de Frida, durante un recorrido previo.
Entre sus muros se pueden admirar objetos personales, cartas, vestidos tradicionales, collares prehispánicos y fotografías familiares, incluyendo el legado del padre de Frida, quien documentó importantes obras arquitectónicas del país a inicios del siglo XX. También destacan los primeros trabajos artísticos de la pintora, como el mural en la cocina y la célebre Charola de amapolas.
Frida más allá del mito
El nuevo museo busca ofrecer una mirada íntima a la mujer detrás del ícono. “Frida no fue nada más la fuerte y la loca (…) Queremos mostrar su cercanía, cariño y humanidad”, señaló Mara de Anda, otra sobrina nieta encargada del proyecto.
La apertura de la Casa Kahlo no solo complementa la visita a la Casa Azul, que recibe miles de turistas cada año, sino que también permitirá aliviar la alta demanda de boletos, que suelen agotarse con meses de anticipación.

Un nuevo destino cultural en la CDMX
Este espacio representa una oportunidad única para los visitantes que buscan vivir la experiencia Kahlo más allá del mito global: desde el entorno familiar y afectivo que marcó su carácter, hasta las tradiciones mexicanas que defendió con orgullo a lo largo de su vida.
Con esta apertura, Coyoacán reafirma su lugar como epicentro cultural de la capital mexicana, sumando otro punto imperdible para turistas nacionales e internacionales que desean acercarse al legado de Frida Kahlo y Diego Rivera.