En el corazón de la selva quintanarroense, a solo 40 kilómetros de la Laguna de Bacalar, emerge la Zona Arqueológica de Ichkabal, un destino que promete convertirse en uno de los sitios más fascinantes del turismo cultural y arqueológico en México. Con una historia que se remonta al Preclásico Medio (alrededor del 400 a.C.), Ichkabal es más antigua que Chichén Itzá y Uxmal, y su reciente apertura al público, el 11 de enero de 2025, marca el inicio de una nueva era para el turismo en el sur de Quintana Roo.
Un viaje al pasado maya
Ichkabal, cuyo nombre en maya significa «entre bajíos», fue un importante centro político y cultural de la civilización maya. Se cree que fue un bastión de la dinastía Kaan’ul (o de la Serpiente), una de las más poderosas del mundo maya. Con una extensión de más de 60 kilómetros cuadrados, el sitio alberga estructuras monumentales que alcanzan hasta 46 metros de altura, superando en tamaño a muchas de las construcciones de Chichén Itzá.
Entre los puntos destacados se encuentran el Edificio 4, que conserva mascarones de 5 metros y rastros de pintura original, y el Edificio 5, con glifos y bajorrelieves relacionados con el inframundo maya. La Plaza Principal, de 300 metros de extensión, y la Aguada de los Cocodrilos, un reservorio de agua que muestra la ingeniería hidráulica avanzada de los mayas, son otros de los atractivos que cautivan a los visitantes.
Acceso y servicios
Ubicada a 75 kilómetros de Chetumal y a solo 23 kilómetros de la estación Bacalar del Tren Maya, Ichkabal es de fácil acceso gracias a este proyecto ferroviario. El sitio está abierto de lunes a domingo, de 8:00 a 17:00 horas, con entrada gratuita para todos los visitantes, una iniciativa que busca democratizar el acceso al patrimonio cultural.
La infraestructura del sitio incluye servicios sanitarios, áreas de descanso, senderos bien definidos y taquillas, aunque no se cobra entrada por ahora. Además, el camino de acceso desde la estación del Tren Maya en Bacalar está recién construido, lo que garantiza una llegada cómoda y segura.
Un destino complementario
Ichkabal no solo es un sitio arqueológico impresionante, sino que también se encuentra cerca de otros destinos turísticos clave en la región. A solo 40 kilómetros está la Laguna de Bacalar, conocida como la «Laguna de los Siete Colores», ideal para relajarse después de explorar las ruinas. Además, forma parte de un circuito arqueológico que incluye sitios como Dzibanché, Kohunlich y Kinichná, lo que permite a los visitantes sumergirse en la riqueza histórica del sur de Quintana Roo.
Consejos para visitar Ichkabal
- Mejor época para visitar: De noviembre a abril, durante la temporada seca, para evitar lluvias que puedan complicar el acceso.
- Qué llevar: Ropa ligera, sombrero, repelente de insectos, protector solar, agua y calzado adecuado para caminar en terrenos irregulares.
- Fotografía: Aprovecha las vistas espectaculares de las estructuras emergiendo entre la selva, especialmente al amanecer o atardecer.
- Respeto al sitio: No subas a las estructuras ni dejes basura; ayuda a preservar este legado para futuras generaciones.